PRESENTACIÓN 

Hola!, mi nombre es Manuel Navaja H.

Nací en la tierra más fértil del mundo, soy Colombiano cordobés con mucho orgullo. 

Soy una persona incluyente, no desprecio a nadie, por tendencias socio-políticas (estatus, color de piel, religión, sexo, conocimiento, lengua, orden geográfico, etc.) o por factores exógenos a tan lamentable decadencia mundial. Gracias A Dios he sabido convivir con toda clase de personas de gran parte del mundo; Venzolanos/as, Ecuatorianos/as, peruanos/as, Chilenos/as, Argentinas/nos, Salvadoreños/as, Gutemaltecos/as, Costarricenses, Mexicanas/os, Norteamericanos/as, Canadienses, Chinos/as, Ingleses, Españolas/es, entre otros.

Temo a Dios, a quien sirvo por fe a través de la comunidad; amo mi familia y respeto los conceptos de los demás, aunque no siempre los comparto.

Veo al mundo con ojos nuevos, desde la perspectiva de un planeta donde la paz y la justicia, sean el pan de cada día; donde los hombres y las mujeres, sepan valorar lo que Dios nos ha legado para que disfrutemos todos/as, donde los alimentos alcancen para toda la población mundial, y no solo unos cuantos se sacien. Un mundo donde haya oportunidades para todos sus pobladores. Dios está de acuerdo con este proyecto de vida. Jesús es mi paradigma.

Desde los inicios de la humanidad, el ser humano está hecho para la investigación, para que a través de ésta, descubra grandes cosas para bien de la humanidad, la ciencia es entonces su herramienta para corroborar lo que en su intelecto se ha imaginado. Nadie más es capaz de descubrir las maravillas del mundo contenidas detrás de la estela de la ignorancia.

Todos y todas estamos dotados de conocimientos listos para explorar, el mundo nos espera para brindarnos toda su materia creada con el fin de lograr ser felices en esta tierra de Dios. Sin embargo, se hace necesario ser aptos para cuidar de ella, de la tierra que es nuestro hábitat, nuestro hogar de paso.

Hoy por hoy, se ha vuelto los ojos hacía este hermoso planeta azul, ( la pacha mama) como dicen nuestros aborígenes, es ella, la tierra la que nos sustenta a los millones de millones de bocas hambrientas que todos los día decesitamos alimentarnos, seres racionales como lo no racionales. Estaríamos el borde de una catástrofe, si no actuamos con prontitud.

Desde este humilde lugar, hago un llamado a los gobiernos del mundo, los poderosos y los de menos poder, para que unamos esfuerzos hasta poder lograr juntos un despertar de conciencia de responsabilidad en la humanidad. Las generaciones futuras que poblarán este planeta, nos lo agradecerán; ellas deben encontrar lo que nosotros hallamos: agua pura, aire puro, tierras sin contaminar y abuenos alimentos para que la vida continúe sobre la faz de la tierra, recordemos que es un mandato de Dios. Allí te dejo la inquietud, tu decides.